
Julian Drago
10 de julio de 2025
Cuando estás al frente de una empresa, cada decisión financiera impacta directamente en la rentabilidad y sostenibilidad del negocio. Si estás considerando adquirir una línea de crédito, una tarjeta empresarial o cualquier otro tipo de financiamiento, es fundamental que no solo revises la tasa de interés, sino el CAT, o Costo Anual Total.
Este indicador te ayuda a comparar con claridad distintas opciones de financiamiento y entender el verdadero costo que asumirá tu empresa. A continuación, te explicamos qué es el CAT, cómo se calcula, por qué es tan importante y cómo usarlo para tomar decisiones financieras más inteligentes.
El Costo Anual Total (CAT) es una medida estandarizada que resume en un solo porcentaje anual todos los costos asociados a un crédito. No se limita únicamente a la tasa de interés; incluye también:
Este indicador fue establecido por el Banco de México como una herramienta comparativa para fomentar la transparencia y permitir a las empresas tomar decisiones financieras con mayor información.
En el entorno empresarial, los créditos pueden tener múltiples usos: capital de trabajo, adquisición de activos, pago a proveedores o gestión de flujo de caja. Pero no todos los productos financieros tienen el mismo costo real. Aquí es donde el CAT cobra relevancia.
Conocer el CAT de una tarjeta de crédito empresarial o un préstamo permite a los responsables financieros:
En otras palabras, el CAT permite tener una visión clara y completa del costo financiero total, algo esencial para empresas que buscan crecer con estabilidad.
El cálculo del CAT se realiza siguiendo una metodología definida por el Banco de México. Aunque el proceso técnico es complejo, en la práctica se basa en sumar todos los pagos obligatorios que implica el financiamiento y expresarlos como un porcentaje anual. Los elementos más comunes incluidos en el cálculo son:
Por ejemplo
, si tu empresa solicita una tarjeta empresarial con una tasa del 30%, una comisión anual de $2,000 pesos y un seguro obligatorio, el CAT reflejará el costo efectivo total de mantener ese producto durante un año, considerando todos esos elementos.
Sí. En México, las entidades financieras están obligadas a mostrar el CAT de sus productos crediticios, tanto en sus plataformas como en la documentación que entregan a los clientes. También deben mostrar el CAT promedio, calculado con base en el comportamiento de sus usuarios, para que sea posible visualizar escenarios realistas.
Aunque el CAT es una herramienta valiosa, hay que tener en cuenta que no incluye el IVA de los servicios financieros desde noviembre de 2009. Esto significa que si comparas CATs entre productos, debes verificar si el cálculo fue hecho antes o después de incluir impuestos, para tener una comparación precisa.
Tampoco incluye penalizaciones por incumplimiento que no estén previamente especificadas, ni contempla factores variables como incrementos de tasas flotantes.
No necesariamente. El CAT representa el costo máximo estimado, pero lo que termines pagando dependerá del uso que hagas del producto.
Por ejemplo, si contratas una tarjeta de crédito empresarial con un CAT del 70%, pero pagas el saldo total cada mes antes de la fecha límite, probablemente solo cubrirás la anualidad, sin generar intereses. En cambio, si difieres pagos o haces disposiciones de efectivo, el costo total se acercará al valor del CAT.
A continuación, te compartimos algunos consejos prácticos:
Imagina que tu empresa está considerando dos tarjetas de crédito corporativas:
Tarjeta Tasa de interés anual Comisión anual CAT A 29% $2,500 68.2% B 36% $0 72.4%
Aunque la Tarjeta B no tiene comisión anual, su tasa de interés más alta hace que su CAT supere al de la Tarjeta A. Si tu empresa planea mantener saldos durante varios meses, la Tarjeta A podría representar un menor costo total.
Muchas empresas cometen el error de fijarse solo en la tasa de interés o en promociones de corto plazo. Como resultado, terminan asumiendo costos más altos de lo necesario. No considerar el CAT puede derivar en:
Conocer el CAT te ayuda a evitar estos riesgos y a mantener el control financiero.
¿El CAT solo aplica a tarjetas de crédito?
No. El CAT se aplica a cualquier producto de financiamiento: préstamos personales, créditos automotrices, hipotecarios, créditos simples o revolventes, y tarjetas, tanto para personas como para empresas.
¿El CAT incluye todos los impuestos?
No. Desde 2009, el CAT se calcula sin considerar el IVA sobre comisiones e intereses. Si un proveedor te entrega un CAT con IVA incluido, este no cumple con la normativa.
¿Dónde puedo consultar el CAT de un producto financiero?
Puedes solicitarlo directamente a la institución financiera o consultarlo en el sitio del Banco de México a través de su herramienta de cálculo de CAT.
¿¿El CAT puede cambiar con el tiempo?
Sí. Si el producto tiene una tasa variable, comisiones que se modifican con el uso, o cambias las condiciones contractuales, el CAT real puede variar respecto al inicialmente informado.
En Openbiz sabemos que elegir un crédito o una tarjeta empresarial no es una decisión menor. Por eso, te ayudamos a entender cada detalle financiero, desde el CAT hasta las implicaciones fiscales, para que tu empresa crezca de forma segura.
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